UNA DE NAVIDADES

Ya estamos en las fechas.... ahora todo son cenas, comidas, buenos deseos, paz, felicidad, amor y un sin fin de buenos propósitos.

Ayer por la noche tenía mi primera cena típica de estas fechas, paseaba por Madrid en dirección al restaurante y me maravillaba lo bonito que estaba con la iluminación navideña. La gente ya enfundada en sus abrigos ( porque como suele ocurrir en Madrid, así de repente ha bajado muchísimo la temperatura), comentaban como este año el Ayuntamiento había cambiado la iluminación. Yo, sumida en mis pensamientos, mas que los cambios, lo que no paraba de dar vueltas era cuánto se había gastado el Ayuntamiento en la nueva iluminación.

No sé porqué en estas fechas, cuando la mayoría de nosotros estamos inmersos en un sin fin de compras, regalos........ siempre me acuerdo de que hay gente que busca abrigo en la puerta del metro debajo de unos cartones. Los sin techo...... seres humanos, como yo, como cualquiera de mis amigos, que por circunstacias de la vida, estan sin nada.

Y aquí me descubrí yo haciendo números (que es lo mío) de lo que el Ayuntamiento se gastaba en luces, mientras que hay gente que se muere de frío y no tiene un techo donde cobijarse. Y así de repente me asaltó la idea de preguntarme: "¿ Quien ____ soy yo para estar juzgando si el Ayuntamiento gasta o no gasta, cuando yo no hago absolutamente nada por ayudar a esta gente?"

En fin, creo que es mucho más fácil y mejor dispersarse pidiendo cuentas a los demás, en vez de pedírmelas a mi misma. Así es que me voy a proponer de cara a este año que viene y no sólo en Navidades, que las cosas dentro y fuera de mi cabeza empiecen a cambiar.

De todas formas mi mejor deseo para estas fechas es que todo el mundo sea inmensamente feliz.