golfista

miércoles, septiembre 17, 2008


Y ese mar.... de sensaciones, quebrado por la inocencia incansable del ser.
Dotado de una luz tan especial, tan oscuro, bravo y tenue a la vez.
Lleno de vida, de pasión que me tienta, me abruma y también me desconcierta.
Ven, siéntate a mi lado y susúrrame, así como tu lo haces, mientras yo te busco sin descanso.
Te quiero, lo intuyes, lo percibes, esa necesidad pasajera que muere en el fin de la ternura.
Abre tus alas y sueña, yo sigo aquí a tu lado, aunque no estés.
Siente la luz de la luna entre la espuma, brilla mientras forjas tu destino.
Invade las dichas y los sinsabores de la pasión y con esa calma oculta, rema sin cesar por el camino marcado, hasta los confines de la vida, de una vida, de esa vida.
Y los mortales se postrarán ante ti, como yo lo hago cuando te siento cerca.
Ohh mar, mar..... de sensaciones.