golfista

jueves, marzo 30, 2006

¿ No pueden comprender los trabajadores que, al trabajar en exceso, agotan sus fuerzas y las de su progenie que están extenuadas y, mucho antes de que les llegue el momento, son incapaces de hacer nada; que, absorbidos y brutalizados por ese vicio, ya no son hombres sino fragmentos de hombres que matan todas las bellas facultades de su interior para no dejar viva y floreciente más que la furiosa locura del trabajo?
Paul Lafargue, El derecho a la pereza (1883)

miércoles, marzo 29, 2006

EL OTRO YO

Se trataba de un muchacho corriente: en los pantalones se le formaban rodilleras, leía historietas, hacía ruido cuando comía, se metía los dedos a la naríz, roncaba en la siesta, se llamaba Armando Corriente en todo menos en una cosa: tenía Otro Yo.

El Otro Yo usaba cierta poesía en la mirada, se enamoraba de las actrices, mentía cautelosamente , se emocionaba en los atardeceres. Al muchacho le preocupaba mucho su Otro Yo y le hacía sentirse imcómodo frente a sus amigos. Por otra parte el Otro Yo era melancólico, y debido a ello, Armando no podía ser tan vulgar como era su deseo.

Una tarde Armando llegó cansado del trabajo, se quitó los zapatos, movió lentamente los dedos de los pies y encendió la radio. En la radio estaba Mozart, pero el muchacho se durmió. Cuando despertó el Otro Yo lloraba con desconsuelo. En el primer momento, el muchacho no supo que hacer, pero después se rehizo e insultó concienzudamente al Otro Yo. Este no dijo nada, pero a la mañama siguiente se habia suicidado.

Al principio la muerte del Otro Yo fue un rudo golpe para el pobre Armando, pero enseguida pensó que ahora sí podría ser enteramente vulgar. Ese pensamiento lo reconfortó.
Sólo llevaba cinco días de luto, cuando salió la calle con el proposito de lucir su nueva y completa vulgaridad. Desde lejos vio que se acercaban sus amigos. Eso le lleno de felicidad e inmediatamente estalló en risotadas . Sin embargo, cuando pasaron junto a él, ellos no notaron su presencia. Para peor de males, el muchacho alcanzó a escuchar que comentaban: «Pobre Armando.Y pensar que parecía tan fuerte y saludable».
El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reír y, al mismo tiempo, sintió a la altura del esternón un ahogo que se parecía bastante a la nostalgia. Pero no pudo sentir auténtica melancolía, porque toda la melancolía se la había llevado el Otro Yo.
Mario Benedetti

lunes, marzo 27, 2006


LA CALZADA ROMANA



Estabamos comiendo y alguien se acercó y nos comentó que a unos 40 kms. de donde nos encontrábamos, habia una calzada y un puente romano, después de discutirlo al día siguiente nos encaminamos al sitio en cuestión para visitarlo.

Una vez encontrado, vimos los carteles indicativos y comenzamos a bajar por el empredado, lleno de musgo resbaladizo. Los árboles nos saludaban en nuestra danza y mi mente como de costumbre, flirteaba con el pasado sin dar tregua, viendo el paraje, imaginaba las legiones romanas descendiendo por aquel pasillo empedrado, con sus trajes, sus espadas, sus lanzas.... regias, marciales, al son de tamores. Las gentes del entorno mirando como embelesadas por el atractivo de las misas, esas caras curiosas oteando la bajada...

Una voz real me sacó de mi sueño diciéndome: "la bajada, todavía, pero ya veremos luego la subida" y es que llevabamos casi una hora bajando.

Al poco tiempo, después de un recodo, allí estaba, majestuoso, sonriendo al tiempo, ese pontón de un ojo que hechizaba, rodeado de vegetación por todos lados y debajo el agua, cristalina, gélida.

La visión era increíble y en ese momento era como transportarse en el tiempo, la piel se erizaba con el silencio, sólo se oía el correr del agua a la lejanía.

Crucé el puente y pude ver que allí la calzada ya no existía, sólo un camino de tierra continuaba la senda trazada.

Volvimos sobre nuestros pasos, para comenzar a subir la cuesta. Costó lo que costó pero cuando llegamos arriba todos dijimos: " Ha merecido la pena".

viernes, marzo 24, 2006



Un paseo por Xan Xoan de Poio (28/08/2005)

Te invito desde el destierro.
Sin despecho, sin rencores.
En este risueño encierro,
hospital de mis dolores,
estoy cantando el entierro
de nuestros muertos amores.
¡Prevista estaba la suerte!
Inquietos y casquivanos,
y puestos entre tus manos,
murieron de mala muerte,
que no hay cosa menos fuerte
que unos amores livianos.
El tuyo liviano era,
y el que te di no me extraña
que víctima suya fuera.
¡Ya no eres tú la primera
pobre mujer que me engaña
de esa sencilla manera!
Y en este juego de amor
sé que quieres demostrar
que no fui yo el burlador...
Tranquila puedes estar,
que yo mismo haré constar
que es muy tuyo el tal honor.
Y dígote sin recelo
que tu engaño hízome daño,
porque yo no soy de hielo;
mas no te parezca extraño
que ahora bendiga ese engaño
que le abre a mi amor el cielo.
Pondrélo en lugar seguro,
pues, tras fracaso tan duro,
no a más mujeres confío
un amor como este mío,
que, por no ser todo impuro,
te ha parecido muy frío.
De una aspiración bendita
te he querido hablar mil veces:
mas sospecho, mujercita,
que esta idea que me agita
no cabe en las estrecheces
de tu linda cabecita.
Haciendo estoy penitencia,
y quiera Dios perdonarme
amores tan desdichados:
quiero limpiar mi conciencia
para ante Dios presentarme
sin esos ruines pecados.
Y limpio de vaho impuro
de aquel amor tentador,
tan torpe como inseguro,
después que me sienta puro,
pondré en Dios todo mi amor,
que en Dios estará seguro
.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Antes que en ese camino,
por donde corres sin tino,
des con un mal caballero
que juegue con tu imprudencia,
te invito a hacer penitencia
y a cambiar de derrotero.
Qué, ¿te ríes?
¡Cuántas veces
he temido, mujercita,
que esta sana aspiración
no cabe en las estrecheces
de esa linda cabecita
y ese enfermo corazón!...
José Mª Gabriel y Galán

miércoles, marzo 22, 2006

UN AÑO MAS

Miro hacia atrás y me parece increíble, es sólo un año más, parece tan lejano y a la vez tan próximo..... Ese tiempo vivido, disfrutado, sentido, con sus alegrias y sus sin sabores, lleno de vivos colores y también, porqué no, con sus tonos grises, ese tiempo lleno de sueños y vacío de pesadillas, ese camino recorrido, a veces tan simple y otras tan sinuoso.....
Aprender a vivir, de eso se trata, aprender a sentir y saber que tocas, aprender a soñar y comprender que eres capaz de realizar tus sueños, saber caminar y sentir que tu alma te dirige, ese alma que te deja hacer, ese alma que respeta tus decisiones, ese alma que camina a tu lado callado, observando y dejándose, ese alma que en mi camino recorrido he aprendido a querer y honrar, ese alma que me acompañará en este cuerpo y después en la eternidad....
Saber que el tiempo no es lineal, una dulce lección, descubrir que el Universo "vive" dentro y fuera de mi, rozar con mis dedos las puertas del cielo con una mirada o una sonrisa, oir el llanto de un niño emperrado en conseguir algo que sabe no le van a dar. Millones de detalles que espero no se me escapen en este nuevo año de vida.
Por todo esto y otras muchas cosas en este nuevo año quiero decir: GRACIAS POR LA VIDA.